SOCIEDAD. El consumo de drogas se convierte en la actualidad en un problema relevante que se vincula con otros factores de carácter económico, cultural, social y de salud que se hace más grave en las grandes ciudades.
En este fenómeno, los adolescentes se identifican como una de las poblaciones de mayor vulnerabilidad, dado que en esta fase suelen reclamar mayor grado de independencia, autonomía e individualidad, aunque principalmente dependan de sus padres y sean ellos un factor determinante en la “crisis del adolescente”.
En este punto el consumo de sustancias adictivas por la población adolescente asume un origen multifactorial, los que serán más severo cuando provengan de hogares disfuncionales o multiproblemáticos.
El uso y/o abuso de nicotina, alcohol y drogas ilegales es una conducta que está siendo cada vez más frecuente en la población adolescente, sobre todo en la asociación a otras conductas de riesgo, tales como violencia, actividad sexual no planificada, deserción escolar, conducción de vehículos en forma imprudente, entre otras.
De allí, que el uso de las distintas drogas, tanto legales como ilegales, se da en relación a un sin número de variables: las relacionadas al sujeto y al proceso en el cuál este se encuentra inserto, la familia, el grupo de pares, el colegio y los contextos de ocio y tiempo libre. Todas estas variables deben ser abordadas y manejadas por los equipos que trabajan con adolescentes, entendiendo que muchas de estas variables, van a ser iniciadoras, gatilladoras o mantenedoras de consumos.
Sabemos, que el deporte y la recreación juegan un papel muy importante en la vida del hombre, debido al gran auge de la actividad físico – deportiva, “el deporte abarca las distintas manifestaciones en diversos órdenes de nuestra sociedad” (García, 1990, pág. 29).
Debemos tener muy claro que el deporte en los niños favorece el aumento de su capital social: produce sentimientos de aceptación social, mejora la calidad de la amistad con los amigos y familiares, desarrolla el liderazgo, el trabajo en equipo, la cooperación, el respeto, la responsabilidad, la cortesía y la integridad; activa el sentido del compromiso cívico y la contribución a la comunidad, y fortalece la resistencia a la presión de los compañeros a participar en comportamientos de riesgo.
Con estos antecedentes previos, la practica de una disciplina como el Taekwondo puede contener en un alto porcentaje estos riesgos, dada sus características de disciplina y esfuerzo físico.
Debemos destacar, que el taekwondo como arte deportivo apoya el desarrollo de capacidades de equilibrio, control postural, esquema corporal y coordinación de movimientos. Pero como antes mencionado, este deporte no solo trata el área física, sino también busca ser impacto en un cambio de personalidad en las personas que lo practican. Los valores como el respeto y compañerismo son objetivos que los jóvenes aprenden dentro de la práctica del taekwondo, López, E. (Entrevista semi-estructurada 18.09.18) Indica “yo empecé a entender que debía respetar a mis maestros y padres cuando en taekwondo me enseñaron que todo lo que se llega a tener y saber cuesta tiempo, mucho esfuerzo y ciertos sacrificios”.
Es una disciplina que forma la personalidad del joven en la reconstrucción de su identidad creando un sentido de pertenencia, y generando un entorno de igualdad, aceptación y respeto, en donde la práctica constante disminuye la probabilidad de reincidencia en la ilegalidad pues promueve el buen uso del tiempo libre, fomenta la disciplina e incrementa la autoestima, entregando a la sociedad personas comprometidas a buscar triunfos en las diferentes áreas de su vida de una manera justa y pacífica.
Es por ello que el Tae Kwon Do no solamente proporciona al alumno elementos de defensa y ataque, sino que tiende a la formación de la personalidad y a brindarle la oportunidad de apropiarse de valores como el respeto, la bondad y la humildad. Su ambición es más amplia; a la vez que educa e instruye, intenta modelar el espíritu, del cual la libertad constituye un objetivo específico y social, contribuyendo a la obtención de los valores que todo individuo debe alcanzar y obtener, para contribuir en crear una sociedad más justa, respetuosa y amante de la paz, la armonía y el amor al prójimo.
Lic. Carlos Hernández
Lic. Luis Ramos
Mundotaekwondo.com